Si no es por uno, es por otro. Si espero olvidar, recuerdo más. Si quiero perder, gano y si quiero ganar pierdo. Si quiero esperar nunca llega y si quiero marcharme, aparece.
Me giro, me miras, te miro. Tu sonrisa blanca, perfecta, hace juego con tus ojos negros, y es entonces cuando algo se enciende, se acciona, y entonces ocurre. Quiero olvidar todas y cada una de tus miradas, pero no puedo... Y cuando todo parece que iba a mejor, vuelve a ser como antes, vuelves a aparecer...
¿De verdad me vas a perseguir toda mi vida, haciéndome las mismas ilusiones que a un niño inocente?
Porque sabes que si abres tu boca para decirme cualquier cosa, voi a caer a tus pies, y eso siempre te funciona. Siempre...
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